Persona social: ¡Llegó la edad de los berrinches! El bebé empieza a ser más expresivo y pone de manifiesto gustos y disgustos. Si una comida no le agrada, es capaz de tirarla de un simple manotón. Es importante empezar a enseñarle que uno entiende el motivo de su enojo, pero no la forma en que lo expresa. Quizás, por trabajo, también llegó la hora de empezar a pensar en dejarlo en una guardería o al cuidado de otra persona. Al principio, la separación será difícil para los dos. Seleccionar y conocer a quien delegarás el cuidado de tu bebé es una buena medida para estar tranquila. Luego, una comunicación fluida facilitará la transición.
Comunicación: Ya entiende palabras, frases simples y órdenes, y empieza a comprender con rapidez nuevos términos. Vas a notar que su vocabulario se amplía, aunque su conversación todavía es balbuceante. No te preocupes si todavía no emite sus primeras palabras. Te escucha y está armando las bases de su lenguaje.
Motricidad fina: De repente, el bebé no quiere estar vestido. Acaba de descubrir que todo lo que se pone, también se saca. En esta etapa es común que se arranque el pañal y tire las medias sistemáticamente. ¡A no desesperar!
Por favor, recordá que estos hitos del desarrollo son aproximados, ya que cada bebé es único. Ante cualquier duda, te sugerimos que siempre consultes al pediatra.
Nota supervisada por el Equipo Médico de Mamashelp.
0 comentarios:
Publicar un comentario