Sofia viene hacia a mi, compungida por haber perdido a su amiga. Le muestro la parte mas alta de los juegos (como unos 4 metros) y le digo que seguro la niña esta alla arriba.
Sofia mira con miedo y dice:
Mama... es que me da miedo tan arriba
Sofi, intentalo, seguro te va a gustar
Sofia empieza a subir por unas escaleras dentro del arbol y me dice
Me lo prometes mama?
Si hijita, ve!
Y si, se armo de valor y subio hasta lo mas alto. No sirvio para encontrar a su amiguita, pero la ayudo a superar su miedo inicial.
4 comentarios:
Sigue sorprendiéndome, después de tantos años, la confianza ciega que tienen nuestros hijos en sus padres... seguro que me dolerá más cuando dejen de tenerla y mis hijas están a punto... culpa de la adolescencia y los miedos a los cambios.
Besos de una maia.
pero... crees que dejan de tenerla?
yo creo que depende del padre... quizas en algo se modifique, pero siempre confiaran en ti...
Eso espero... pero empiezan a cuestionar mis decisiones. Por experiencia propia, después volvemos a confiar en nuestros padres, pero la adolescencia es una edad terríblemente difícil, para los hijos y para los padres.
Suerte la tuya. Hasta el dia de la fecha, aun no recupere la confianza en ellos...
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